A finales de junio saltaba la noticia de que Mercadona estaba vendiendo por 5 euros una crema antiedad, Sisbela, que el laboratorio vendía, con otro nombre, en su página web por 80 euros. Los responsables del labotario hablaban de esa gran rebaja que podría ofrecer Mercadona gracias al gran volumen de venta.
Con semejante panorama me vi obligada a comprarla, para probarla y una vez finalizado el primer bote de tratamiento no tengo duda de que esa noticia y el precio hinchado en la web del labotario es una estrategia de venta filtrada por Mercadona, ya que puedo decir que es una buena crema hidratante sin más.
Como hidratante ofrece buenos resultados, pero la cremosidad no es adecuada, dura muy poco y aporta poca luminosidad y efecto antiarrugas, no dejando apenas efecto sedoso en la piel una vez que la aplicas.
No me parece efectiva para evitar la resecación y las arrugas en las ojos. Para un tratamiento de larga duración, mi sensación tras gastar un tarro, es que no se consiguen los resultados que se buscan, especialmente a mujeres a partir de los 30 años. Creo que es un tratamiento que sirve de comodín para la tarde entre un buen tratamiento de mañana y el tratamiento antiedad de noche.
Lo mejor de Sisbela es que da una hidratación justa, no es especialmente grasa. Pero la mayoría de sus ingredientes son de origen mineral, no de origen vegetal, por lo que apenas aporta nutrición a la piel.
Como conclusión solo quiero decir que se trata claramente de una estrategia de marketing porque el tratamiento llevaba más de un año en el mercado cuando saltó el boom de la diferencia de precio. Si buscas una crema hidratante Sisbela es una buena opción, pero como crema antiedad y nutritiva no te la recomiendo.